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La nueva guerra entre Adidas y Nike

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Cuando pensábamos que esta rivalidad solo estaba dormida, un fuerte golpe de los americanos despertó esta batalla que parece estará muy prendida por unos años en distintos deportes.

Estamos a punto de ver jugadores, equipos y diseños que quizá estábamos acostumbrados ver en una marca, verla con otra en el pecho. La mudanza de Alemania con la marca de la palomita inició una batalla intensa, que quizá revolucione el marketing.

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Vamos a ver lo que desató este cambio histórico de marca en Alemania y las consecuencias que esto puede traer.

Fue casi un asunto de estado

Adidas y Alemania siempre se han relacionado de la mejor manera, es más, si viajamos en el pasado, la marca de las tres líneas casi siempre ha estado a lado del escudo de la Federación Alemana de futbol.

Su relación va desde el famoso milagro de Berna, donde Alemania, portando uniforme y botas Adidas, que en ese momento eran revolucionarias, pues eran intercambiables y les dio cierta ventaja contra sus rivales, La Mannschaft venció 3-2 a Hungría, la favorita, en un emocionante partido.

El problema entre la marca alemana y la selección del mismo país, se dio porque, aunque tenían contrato por trabajar juntos, Adidas nunca les renovó y les aumentó el patrocinio. La Federación teutona consideraba que merecían un aumento y no consideraba justo que selecciones que no tienen el palmarés y ventas de Alemania, recibieran más dinero que ellos.

Adidas les informó que no les mejoraría los 50 millones de euros por año que les daban, confiados en que la tradición pudiera más que el dinero, no esperaron que Nike ofreciera casi el doble a Alemania, que sin titubear aceptó el trato que será efectivo a partir del 2026.

Cuando la noticia se ventiló de inmediato corrió como pólvora y explotó en todas partes del mundo porque se rompió una relación de casi 80 años. El ministro de economía de Alemania salió a decir que esto era un desastre total, porque Adidas y la selección generaban mucho dinero por su negocio juntos y daba muchos empleos que ahora se perderán.

Hasta el primer ministro, Olaf Scholtz, dijo que esto era una pésima noticia, porque Adidas es una marca alemana y no consideraba patriota que una marca extranjera vistiera a la selección nacional. Dentro de la Federación de inmediato dijeron que pensaban en lo mejor para el equipo y esto era la oferta que Nike había dado.

Dentro de Adidas fue un desastre, se reportó que varios ejecutivos perdieron su empleo, porque nunca le mostraron respeto a la Federación Alemana de futbol y perdieron uno de los contratos más grandes y representativos de la marca, por un exceso de confianza.

Pero esta confianza no solo venía de la relación entre la marca y la Mannschaft, sino que Nike avisó que tendría recortes de cerca de 1 billón de dólares y esto significaba dejar patrocinios importantes como el de Tiger Woods y de varios equipos, para enfocarse solo en el futbol femenil y otros mercados emergentes.

Obviamente, su decisión hizo que Adidas no pensara en subirle la cuota a la selección alemana, pero dentro de Nike, sabían que Adidas bajaría la guardia y activaron la oferta. Una de las más agresivas de la historia del futbol, y la consiguieron.

Las consecuencias.

Adidas se deshizo de muchos ejecutivos como lo mencionamos, pero contrató a varios de los despedidos por Nike por los recortes que hizo. La estrategia ahora es mucho más agresiva en el futbol. 

Están buscando dar un golpe en la mesa con el que puedan apagar el incendio que provocó la salida de la selección alemana de su cartera. Sondearon al FC Barcelona, que tuvo muchos problemas con Nike, pero decidieron que quizá no era el camino.

Renovaron su contrato con FIFA y UEFA, y les doblaron el dinero del patrocinio, pues no quieren perder los dos torneos más importantes del planeta, la Champions y el Mundial. Ahora están buscando contratos de estrellas individuales, y dominan el mercado de selecciones.

En la Copa América renovaron sus contratos y aumentaron los premios para el actual campeón del mundo y del continente, Argentina, y el de la selección que más genera ventas en el mundo, México. No quieren que Nike tome más contratos en Sudamérica.

Adidas no tenía tanta presencia en el mundo del futbol femenil, pues ese es un mercado exclusivo casi de Nike, pero después del inicio de la batalla, se han metido a fondo y buscan más equipos y jugadoras. Se sabe que han sondeado a Aitana Bonmatí, la actual Balón de Oro, pero no han podido cerrarla.

También están planeando una presencia mucho más grande en los juegos Olímpicos de París, donde Nike tiene muchos atletas. Adidas contrató también a muchos diseñadores y atrajo a atletas que la marca americana desamparó por los recortes. 

En este momento la marca alemana está viendo de qué manera lastimar a Nike, que le quitó un negocio de cerca 200 millones de dólares anuales con Alemania. Esta desesperación los ha llevado a gastar casi la misma cantidad en contrataciones y patrocinios que no tenían en este momento.

Muchos analistas opinan que esta estrategia no es buena para Adidas que va a sentir las consecuencias en unos años, porque están gastando mucho más de lo que pueden recuperar y van a tener que recortar.

Por su lado, Nike sigue apuntando en otros mercados, pero están tranquilos en este modo austero, pues el contrato de Alemania es un gran ingreso que los proyecta a recuperar lo perdido en los últimos 5 años. ¿Cómo ven esta nueva batalla de marcas?

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